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Portada Revista Investigación y Marketing. Dic. 2013

Portada Revista Investigación y Marketing. Dic. 2013

Con el título «Crowdfunding: antes del funding está el crowd» he publicado un artículo en el número de diciembre 2013 de la Revista de Investigación y Marketing, editada por AEDEMO, la asociación que en España agrupa a los profesionales de la investigación de mercados y opinión.

Doy las gracias a Juanjo Ibáñez, director de la revista, y a Xavier Moraño miembro del consejo editorial que solicitó mi colaboración en este número.

Comparto aquí el contenido del artículo.

Resumen.
El crowdfunding ha llegado para quedarse entre nosotros y jugar un papel relevante en la creación de nueva vida económica. Lo que comenzó siendo una fórmula de apoyo a proyectos culturales de raíz Indie, se ha ido extendiendo por todo tipo de proyectos y latitudes en los últimos cinco años.
Hablamos de un fenómeno global que en España ha prendido con fuerza.

Necesitamos entender lo crowd para comprender el funding.

Así, en el término “crowd” (traducido del inglés como multitud) conviven dos significados. De un lado “multitud” nos habla de colectivo desde lo numérico. Comparte con el término “masa” una inclinación al número grande.

Pero de otro, el término crowd nos habla de “comunidad”, entendida como ese lugar donde los individuos se encuentran desde la afinidad y el propósito en común. Esta condición de “comunidad” pesa más que la de “multitud” cuando hablamos del crowd que habita en el crowdfunding.

Desde este punto de vista lo crowd es, antes que un grupo de personas más o menos numeroso, una energía social disponible que se activa cuando cuaja en comunidad.

El crowd-building es una emergente disciplina socio-tecnológica, quienes la dominan dan vida a fenómenos donde apreciamos la integración de dos fuerzas convergentes:

  • Engagement: la implicación que los miembros de la comunidad dedican con su participación.
  • Empowerment: el empoderamiento personal de los sujetos que forman la comunidad.

Allí donde convergen engagement y empowerment está la clave de las comunidades que llevan adelante sus proyectos como comunidades. Este empower-gement es la danza entre el Yo y el Nosotros. Lo uno sin lo otro no alcanza para extraer el néctar de la energía social residente en lo crowd.

La exploración, descubrimiento y puesta en valor de esta energía social está creando nuevas formas de vida económica empresarial al calor de conceptos como Sharing Economy, Collaborative Consumption o Indie Capitalism. Una Nueva Economía impulsada por líderes empresariales de nuevo cuño que comprenden la potencia de la energía crowd y saben cómo activarla (recomiendo seguir los trabajos de la investigadora Rachel Botsman).

rachel_botsman

Una parte importante de esa nueva vida económica son las plataformas de crowdfunding, y dentro de ellas Kickstarter es el buque insignia de ese fenómeno. Un referente a escala global.

Algunos datos sobre Kickstarter:
Fundada en EE UU en abril de 2009. En 2012 abre oficinas en Reino Unido y desde 2013 en Canadá, Australia y Nueva Zelanda.

Los proyectos tienen un máximo de 60 días para conseguir la financiación que solicitan. Si en ese plazo no llegan a la cuantía solicitada no reciben nada. Si lo rebasan no hay limitaciones, reciben todo lo que sea aportado por los mecenas que apoyen el proyecto.

Kickstarter cobra el 5% de las contribuciones si el proyecto llega al éxito. Si no llega, no cobra nada.

En el momento que escribo estas líneas (viernes ocho de noviembre de 2013) hay 4.199 proyectos activos en Kickstarter solicitando financiación.

Desde su creación hasta hoy se han subido a esta plataforma 121.400 proyectos. De ellos el 43% logró su objetivo de financiación.

kickstarterEste ingenio socio-tecnológico ha contribuido a poner en juego más de 51.000 proyectos en menos de cinco años, concretamente en cuatro años y siete meses: 30 proyectos al día.

Desde su fundación los proyectos subidos a Kickstarter han logrado imantar la cuantía de 863 millones de dólares, de los cuales:

  • 739 millones corresponden a los más de 51.000 proyectos que llegaron al éxito.
  • 98 millones a los 70.000 proyectos que no lo alcanzaron.
  • Y 26 millones a los 4.199 proyectos que ahora mismo están activos.

Esos 863 millones de dólares han sido creados mediante 11,9 millones de aportaciones efectuadas por 5,1 millones de personas, de las cuales el 29% ha hecho aportaciones a más de un proyecto.

De lo anterior se desprende que la aportación media es de 72 dólares y que la ratio global es de 100 mecenas por proyecto. Hablamos por tanto de un fenómeno de magnitud considerable, pero compuesto por proyectos de escala bastante manejable. De hecho:

  • El 75% de los proyectos exitosos recabaron menos de 10.000 dólares.
  • Un 23% recabaron entre 10.000 y 100.000 dólares.
  • Y tan sólo el 2% consiguieron más de 100.000 dólares procedentes de sus mecenas, habiendo 51 proyectos hasta la fecha que han superado el millón de dólares. El record: 10,2 millones del proyecto Pebble, un smartwatch.

Esta idoneidad del crowdfunding para ser aplicado en escalas manejables es una de las principales razones por las que su uso se va extendiendo por todo tipo de actividades y latitudes.

Lo que comenzó siendo una fórmula para financiar proyectos culturales de naturaleza indie (música, cortometrajes, teatro, fotografía, comic, …), se fue extendiendo hacia todo tipo de proyectos e iniciativas donde un Creador busca establecer un puente directo con su Público, proponiendo que éste se implique en su desarrollo y obtenga, en intercambio, un beneficio que puede tomar diferentes formas.

Hay dos formatos básicos a través de los cuales se ha venido concretando esa relación directa entre Creadores y Público:

1. La donación, entendida como el apoyo a un proyecto simplemente “porque sí” por el simple -y gran- hecho de que el mecenas quiere que salga adelante, sin más retorno (que ya es), o con retornos de carácter sentimental (camisetas, chapas, figurar en los créditos …).

2. Pre-compra: antes de que un bien se fabrique o un servicio se preste, la idea me gusta, la quiero, confío en el creador y la pre-compro. Es decir, “comprar fiado”. Arriesgo mi dinero en la confianza de que ese producto/servicio va a satisfacer mis necesidades. A cambio obtengo el beneficio de adquirirlo a menor precio que si hubiera sido creado por el conducto clásico, o tener un producto o servicio en exclusiva que de otro modo no sería posible disfrutar.

Ambos formatos han estado -y están- muy presentes en la expansión del crowdfunding en el mundo. A medida que el fenómeno ha ido creciendo en tamaño y relevancia, van tomando cuerpo otros dos modos de participar como “mecenas”, que están siendo usados por algunos inversores:

3. Préstamo. Decido invertir en un proyecto prestando dinero a cambio de un interés, financiación sin más.

4. Accionista: aporto capital y tomo una participación en la propiedad.

crowdcubeEl préstamo y la participación en la propiedad son formas de lo que se viene denominando el Equity Crowdfunding, del que se espera un fuerte crecimiento en los próximos años por la capacidad de atraer el interés de inversores, especialmente micro-inversores (el lugar de referencia en estos momentos es la plataforma Crowdcube).

Esto hace que el ecosistema crowdfunding se haga más complejo, más diverso y con la participación de diferentes roles: gestores de las plataformas, creadores de proyectos, donantes, pre-compradores, inversores, analistas del riesgo, asesores de inversión … y, también, organismos reguladores.

Hasta hoy el crowdfunding se ha desarrollado por el impulso espontáneo de la sociedad civil orquestada en comunidades. Una vez demostrado su éxito y viabilidad, está en juego el Gran Salto que, para producirse, necesitará de una legislación que aporte garantías, sin mermar la frescura del fenómeno. En este asunto veremos una muestra del delicado equilibrio entre seguridad (jurídica) y libertad (creativa).

En cualquier caso, sea cual sea el tacto del legislador, el crowdfunding ha llegado a nuestras sociedades para quedarse entre nosotros. ¿Por qué pienso así?:

1) Porque es transparente.

2) Porque hay intercambio simétrico entre las partes.

3) Porque permite que una comunidad de personas afines y con un propósito en común se responsabilice por hacer posible lo que quiere.

4) Porque promueve la excelencia: los creadores tienen que ofrecer la mejor versión de sí mismos para captar el interés de su público.

5) Porque es altamente eficiente: el 100% de los recursos liberados van a la creación.

6) Porque protege la libertad creativa: el creador toma el control del proceso de creación, sin injerencias de los financiadores en sus decisiones. Este es un aspecto clave del fenómeno y el Equity Crowdfunding y los reguladores tienen ahí uno de los principales desafíos.

7) Porque gracias a las plataformas es sumamente sencillo el acto de participar para quien quiere apoyar una iniciativa.

8) Porque es un proceso de co-gestación, ya que el creador no sólo toma el recurso económico sino también el aliento de su público.

9) Porque hay sensación de conquista.

10) Porque, gracias a todo ello, la comunidad se empodera, dotándose de mayor capacidad para plantearse la siguiente iniciativa: es un modo de relación que guarda memoria y se hace cada vez más fuerte.

Todo ello nos ayuda a entender la curva que vemos en la figura 1 donde aparece la gráfica de Google Trends cuando le pedimos las búsquedas del término “crowdfunding” en el mundo. Ahí se aprecia como la naturaleza lineal del crecimiento de los primeros años da paso a una dinámica exponencial a partir de 2012.

SearchFor_Crowdfunding_worlwide

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Algo similar vemos en la figura 2 que muestra los resultados de la misma búsqueda en España. En nuestro país son varias las plataformas de crowdfunding que han visto la luz en los últimos años, siendo tres de ellas las que han alcanzado ya un punto de madurez: lánzanos, verkami y goteo.

SearchFor_Crowdfunding_Spain

SearchFor_Crowdfunding_Spain

Me detendré un momento a comentar algunos datos que cualquier persona puede consultar en la web de Verkami:

Fundada en Mataró a finales de 2010 por un padre y sus dos hijos, aficionados a las artes y la cultura.

Verkami_foundersEl pasado mes de octubre fue galardonado por Naciones Unidas.

Hoy, ocho de noviembre, tiene 180 proyectos activos.

Desde su fundación ha alojado 2.200 proyectos, de los cuales el 70% (1.530) alcanzó la financiación que solicitaba.

En un momento de profunda dificultad económica en nuestro país Verkami ha atraído 7,43 millones de euros procedentes de 189.000 contribuciones. La contribución media es de 32 euros.

Salvando las distancias, el fenómeno presenta claras simetrías de naturaleza con Kickstarter. Volvemos a ver la escala manejable de proyectos que tienden un puente directo entre Creadores y (su) Público, atrayendo aportaciones de pequeña cuantía que, sumadas, hacen un cambio sostenido y relevante.

El crowdfunding está permitiendo liberar micro-recursos hacia el torrente sanguíneo de la economía que de otro modo no se pondrían en juego.

Permite liberar en forma de dinero la energía social residente en las comunidades: crowdpower.

Nos muestra que lo pequeño no sólo es hermoso, también poderoso.

Por ello, para compensar cada Telediario que veáis, os animo a dar una vuelta por la plataforma de crowdfunding que más os guste. Y, por su puesto, os animo a que contribuyáis a los proyectos que os interesen.

Es un gozo para el alma Apreciar Verdaderos Brotes Verdes.

Referencias:
www.rachelbotsman.com
www.kickstarter.com
www.verkami.com
www.lanzanos.com
www.goteo.org
www.crowdacy.com
www.manifiestocrowd.com