Dancer_BravoFact

Este post cobra todo su sentido si también lees el que publiqué en este mismo blog el jueves  1 de mayo.

En el video puedes ver al bailarín de la foto en movimiento. Al observarlo me surge una pregunta: ¿el movimiento SALE de su cuerpo o ENTRA en su cuerpo?

[youtube http://www.youtube.com/watch?v=4OR-n3Rg6E8&w=560&h=315]

Comparto esta pregunta porque me ayuda a entender el fenómeno sutil de la coherencia, la relación armónica entre los dichos y los hechos.

Veamos. El cuerpo del bailarín sin el movimiento no nos cuenta la historia que tiene para nosotros. El movimiento sin el cuerpo no deja de ser un fenómeno imaginario que no puede concretarse. Movimiento y cuerpo; cuerpo y movimiento forman una Unidad que es la que llega a nosotros indivisible.

Haciendo el paralelismo con nuestro branded content: la Coherencia (el movimiento) necesita de la armonía en el binomio Dichos-Hechos (el cuerpo) para llegar a ser. Hasta el punto que uno ya no sabe si la coherencia emana de los dichos-hechos o éstos emanan de la coherencia. El caso es que ahí se forma la Unidad Indivisible donde reside la potencia de comunicación.

Como sostengo en mi post del pasado jueves, esa unidad indivisible tiene un nombre: Integridad. Y desde ahí hablo cuando afirmo:

El branded content eficaz es para marcas íntegras, aquellas donde hay coherencia entre los dichos y los hechos. Y las marcas íntegras son la consecuencia de líderes igualmente íntegros.

La marca, institución, organismo … que decide guiarse por lo íntegro está poniendo rumbo a un territorio habitado por lo honesto, lo completo, lo cabal, lo justo, lo fiable, lo honrado, lo insobornable,… Es decir, se dirige a construir un caudal de legitimidad tal, que hará fértil cualquier intento de vincularse con su público a través de una historia.

Ya sé lo que estáis pensando: ¿hay de esos?

Haberlos haylos. Tenemos un caso bien cerquita, se llama Pedro Serrahima y dirige Pepephone. Sólo un dato: es la primera marca que yo conozco en la que un grupo de clientes se moviliza para pagar más: #YoPagoMiSIM

Este post ha sido publicado originalmente en el blog Innovación Audiovisual:

Foto: fotograma del video en youtube de BravoFest, Lost in Motion 2011.https://www.youtube.com/watch?v=4OR-n3Rg6E8

SOLO_FACHADAHace unas semanas María Luisa Jiménez Molero me pidió opinión en estos términos:

«En el proceso de investigación para mi proyecto he detectado que muchas veces el término branded content no se emplea correctamente o existe cierta confusión dentro del sector sobre lo que se considera branded content ¿podrías por favor definir qué es para ti branded content?»

Seré radical, esto es, me tomo la licencia de extenderme un poco para ir a la raíz.

El branded content tiene su epicentro en la experiencia del usuario con tu marca. Ahí comienza y termina todo: en el producto o servicio que intercambia con sus clientes. Pero por favor, no me malinterpretes: la experiencia del usuario es el origen y el destino de tu viaje, pero no es lo único que cuenta. El viaje es eso, un viaje, y también forma parte de la experiencia de marca, por ello tiene que estar en sintonía con el resto de aspectos de esa experiencia de marca.

Me explico.

El consumidor es social en un doble sentido. De un lado como sujetos que vivimos en sociedad, (todas) nuestras decisiones están influidas por el entorno en que vivimos: familiar, social, histórico, cultural, económico, tecnológico … Necesitamos conocer las opiniones y comportamientos de otros para dar forma a los nuestros. Por ello las decisiones de consumo tienen (y ya tenían) una componente social tan importante.

Y de otro, hemos de sumar que el consumidor hoy tiene más fácil la posibilidad de invocar a la opinión de otros en la red (la inteligencia colectiva) para inspirar sus decisiones de consumo. Esto es una gran noticia para las marcas auténticas.

Si una marca en sus intercambios con sus consumidores genera experiencias positivas estará fertilizando su propio terreno porque incrementa la probabilidad de que haya usuarios hablando bien de ella en ese magma de contenidos naturales que se cuecen en el CrowdMedia.

Por tanto, la capacidad de una marca de ser elegida por una decisión de consumo cada vez está más influida por lo que las opiniones independientes expresen sobre ella, ya sea espontáneamente o cuando se les pregunta.

La conclusión no puede ser más sencilla: asegúrate de que tu experiencia de marca proporciona a la gente un motivo para hablar bien de ti, y deja que lo digan a su modo, a quien quieran, donde quieran y cuando quieran.

Entonces, ¿quiere decir que una marca debe abandonar su comunicación publicitaria, o dejar de prestar atención y presupuesto a tener un discurso propio?

No, ¡ni por asomo!

Este capital de comunicación en forma de contenidos naturales va a convivir en la vida de la marca con los contenidos propios y los concertados. Por mucho que el consumidor acuda a la inteligencia colectiva, las marcas no pueden dejar de contar historias ni en su publicidad, ni en sus promociones, ni en sus patrocinios, ni en las apariciones de sus líderes, ni en sus notas de prensa, etc …

El desafío es ¿Qué tiene una marca que enfocar para que el discurso propio empaste con ese otro caudal de contenidos naturales, de tal modo que hagan un Todo Coherente donde se presten mutuamente poder?

El branded content aplicado al discurso propio de la marca a través de sus historias (encarnadas en múltiples formatos: spots, patrocinios, eventos, promociones, discursos, noticias, sorteos, concursos etc…) gana mucho si es Coherente con la experiencia que la marca quiere y puede hacer vivir a sus clientes.

Si no es coherente termina siendo un parche más que el consumidor percibe como «puro marketing», es decir, otra forma de construir una apariencia seductora que me distrae de la verdad del cuento. Ahí la marca cosecha la indiferencia y, en algunos casos, el rechazo.

Un par de ejemplos: resulta muy poco eficaz pretender cosechar la simpatía de los consumidores promoviendo el cine, y a la vez vivir el momento de mayor desencuentro entre la sociedad y las compañías energéticas. Hay compañías de telecomunicaciones que invierten grandes sumas en los festivales de música y cosechan «retorno inverso»: caen aún peor entre el público asistente.

¿Deben invertir en branded content mientras son compañías que despiertan rechazo? Creo que sí deben invertir en branded content pero, para que luzca, esa inversión debe ir acompañada de una mejora en el intercambio con sus clientes.

Ahora puedo responder a tu pregunta: para mi el branded content es un ejercicio de Coherencia donde tienen que danzar en armonía los hechos y los dichos de una marca. Tanto los dichos y hechos que hablan al hemisferio derecho (arte/emoción), como los que hablan al izquierdo (ciencia/razón).

Por eso el branded content es algo que está mucho más allá del departamento de marketing o de comunicación. Es un asunto de quien ejerce el liderazgo en la empresa.

Dichos, hechos y coherencia.

Los dichos son conmensurables, los hechos aún más ¿pero la coherencia? La coherencia emana de la relación que se establece entre dichos y hechos.

Los dichos y los hechos son el vehículo (lo material), pero es la coherencia la que tiene el poder de imprimir huella.

Dicho lo cual, comparto ahora con los lectores una serie de vivencias personales de los últimos meses:

Mayo 2013. La compañía donde tengo asegurado mi coche afirma en su publicidad que el precio de las pólizas baja a medida que pasan lo años. Voy por el cuarto año y en vez de bajarlo, me lo han subido el 8%. Les pregunté el motivo por twitter y me dijeron por un mensaje privado que el precio sube «debido a condiciones actuariales», cuando les dije que o me hablaban con claridad o me daba de baja empezó el carrusel robótico de SMS`s: «siendo imposible localizarle telefónicamente en relación a su solicitud, rogamos nos llame al 900xxxxxx para finalizar su gestión.» Me envían uno al mes y así puntualmente consiguen refrescarme con qué empresa no quiero contratar mi próximo seguro.

Junio 2013. La empresa que prestaba el servicio de ADSL en mi vivienda me dejó, por avería, una semana sin conexión. Hablar con su 902 durante 220 minutos me costó más de 100 euros. Finalmente, ante la falta de respuesta decidí darme de baja, para lo que tuve que enviar un burofax que me costó otros 20 euros y más de 45 minutos de mi tiempo. No recibí ni una disculpa. Posiblemente en su CRM pasé a ser uno más de los cientos de miles de clientes «flotantes».

Noviembre 2013. Contraté otra compañía y cuando cambié de domicilio dentro de la misma provincia me dijeron que «eso era muy complicado», que tardarían más de treinta días, salvo que diera de baja la línea -claro, pagando la claúsula de permanencia- y contratara el alta de otra en el nuevo domicilio. Llamé a un ejecutivo de esa compañía, cliente y amigo, y todo se resolvió en 24 horas, lo que causó en mi peor impresión aún de servicio al cliente.

Noviembre 2013. La cadena de hotel que uso en Valladolid desde hace mas de ocho años, a la que mi cliente paga por adelantado mi estancia de pensión completa, decide cerrar el restaurante del hotel, pero no te lo dice con antelación sino que te das cuenta cuando llegas. La alternativa que te ofrecen es doble a) o pides por teléfono a una pizza a la cadena de fast food correspondiente o b) puedes ir a comer o cenar a otro hotel que la cadena tiene en la ciudad. Olé, Olé, Olé. Eso sí, el dinerito por mi pensión completa ya está en su cuenta. Por cierto, me han dicho que el sector hostelero está que bufa con un tal Airbnb ¿por qué será?

Diciembre 2013. El banco del que soy cliente desde hace varias décadas me quiso cobrar una comisión de 20 euros por recibir una transferencia de 26, argumentando que se trataba de una operación internacional. Aún cuando les demostré que la transferencia procedía de una sucursal de Bankia de la calle Toledo, Madrid, el subdirector de la oficina me dijo «esta vez te lo devolvemos, pero es la última vez». Efectivamente, en eso sí que tiene razón pues en cuanto tenga ocasión dejaré de ser cliente (por cierto, la decisión ya está tomada, pero su flamante CRM nada puede saber al respecto).

Marzo 2014. La compañía del gas en mi anterior domicilio ha intentado cobrarme casi 900 euros por consumos de gas en fechas posteriores al cambio de domicilio. Aunque se lo he dicho y demostrado fehacientemente en varias ocasiones, termina ocurriendo no sé qué cosa en el sistema y, casualmente, emiten una factura y una orden de cobro a mi cuenta corriente cada dos meses.

(podría seguir, pero qué cansino ¿no?)

Todas estas compañías son grandes anunciantes y tarde o temprano harán su pinitos en el branded content, seguro. ¿De verdad creemos que puede ser un camino eficaz para las marcas si no se ponen a regenerar el intercambio con sus clientes?

¿Alguien piensa que se puede establecer un vínculo con el consumidor a través de impecables historias de «entretenimiento» mientras la experiencia de usuario presenta serias deficiencias?

El branded content eficaz es para marcas íntegras, aquellas donde hay coherencia entre los dichos y los hechos. Y las marcas íntegras son la consecuencia de líderes igualmente íntegros.

Y si no, es una fachada más. Más mona, pero «mona se queda».

Este post tiene un epílogo aquí.

(por cierto me encanta el patinaje sobre hielo como historia de coherencia entre las partes y el todo).

Post publicado originalmente en Innovación Audiovisual.

Sí, el público. Ese «ente» que cada vez cuenta menos para tantas marcas que, paradójicamente, viven de él.

Este video es un refrán: «de bien nacidos es ser agradecidos«. Habla de una historia simple y poderosa: se llama GRATITUD y es la energía que mueve el intercambio entre las personas.

Lo usaré en las escuelas de negocios, donde tanto se necesita.

Que ustedes lo disfruten.

Con ese título impartí una conferencia en el Inesdi Digital Business School el viernes 21 de febrero de 2014.

La conferencia forma parte de las actividades preparatorias del Postgrado en Branded Content and Transmedia Storytelling que se celebrará entre marzo y julio de 2014. El programa es de 120 horas de duración y ha sido cuidadosamente diseñado por Eduardo Prádanos.

Comparto con todos vosotros el material que utilicé en la conferencia la cual, en síntesis, trató los siguientes temas:

1. Las dos naturalezas de «lo crowd»: multitudes y comunidades.

2. ¿Qué está pasando con el crowdfunding? Una mirada sobre kickstarter, sobre el (interesantísimo) fenómeno Fair Phone y el impulso que tiene este fenómeno en España.

3. ¿Pueden las marcas nutrirse del CrowdPower, esa energía social que habita en las comunidades? ¿Pueden las marcas ser algo más que meros espectadores del fenómeno crowd?

4. Siempre hay pioneros: el caso Pepephone como marca-comunidad. Toqué el tema de Pepephone como marca con un modelo de negocio basado en la Integridad, entendida como la coherencia entre los dichos y los hechos. Con ello está logrando algo más que «clientes satisfechos»; está logrando «clientes agradecidos», casi casi podemos hablar de «Pepefans«.

5. El nuevo paradigma emergente: de impactar a dejar huella; de la notoriedad a la gestión del olvido; de la fidelidad a la colaboración; en definitiva: de la satisfacción a la gratitud.

 
Espero que este material os sea de utilidad. Y me encantará conocer vuestras impresiones, críticas, sugerencias …

 
[slideshare id=31580689&doc=justcrowdit-140224113714-phpapp02]

Los amigos de Netquest han creado una sección en su blog llamada «Héroes de la Investigación» donde van a publicar entrevistas con investigadores sociales. He tenido el honor de inaugurar la sección.

Os dejo aquí el link a la entrevista donde podrás conocerme un poco mejor.

Luis Miguel Barral

 

Portada Revista Investigación y Marketing. Dic. 2013

Portada Revista Investigación y Marketing. Dic. 2013

Con el título «Crowdfunding: antes del funding está el crowd» he publicado un artículo en el número de diciembre 2013 de la Revista de Investigación y Marketing, editada por AEDEMO, la asociación que en España agrupa a los profesionales de la investigación de mercados y opinión.

Doy las gracias a Juanjo Ibáñez, director de la revista, y a Xavier Moraño miembro del consejo editorial que solicitó mi colaboración en este número.

Comparto aquí el contenido del artículo.

Resumen.
El crowdfunding ha llegado para quedarse entre nosotros y jugar un papel relevante en la creación de nueva vida económica. Lo que comenzó siendo una fórmula de apoyo a proyectos culturales de raíz Indie, se ha ido extendiendo por todo tipo de proyectos y latitudes en los últimos cinco años.
Hablamos de un fenómeno global que en España ha prendido con fuerza.

Necesitamos entender lo crowd para comprender el funding.

Así, en el término “crowd” (traducido del inglés como multitud) conviven dos significados. De un lado “multitud” nos habla de colectivo desde lo numérico. Comparte con el término “masa” una inclinación al número grande.

Pero de otro, el término crowd nos habla de “comunidad”, entendida como ese lugar donde los individuos se encuentran desde la afinidad y el propósito en común. Esta condición de “comunidad” pesa más que la de “multitud” cuando hablamos del crowd que habita en el crowdfunding.

Desde este punto de vista lo crowd es, antes que un grupo de personas más o menos numeroso, una energía social disponible que se activa cuando cuaja en comunidad.

El crowd-building es una emergente disciplina socio-tecnológica, quienes la dominan dan vida a fenómenos donde apreciamos la integración de dos fuerzas convergentes:

  • Engagement: la implicación que los miembros de la comunidad dedican con su participación.
  • Empowerment: el empoderamiento personal de los sujetos que forman la comunidad.

Allí donde convergen engagement y empowerment está la clave de las comunidades que llevan adelante sus proyectos como comunidades. Este empower-gement es la danza entre el Yo y el Nosotros. Lo uno sin lo otro no alcanza para extraer el néctar de la energía social residente en lo crowd.

La exploración, descubrimiento y puesta en valor de esta energía social está creando nuevas formas de vida económica empresarial al calor de conceptos como Sharing Economy, Collaborative Consumption o Indie Capitalism. Una Nueva Economía impulsada por líderes empresariales de nuevo cuño que comprenden la potencia de la energía crowd y saben cómo activarla (recomiendo seguir los trabajos de la investigadora Rachel Botsman).

rachel_botsman

Una parte importante de esa nueva vida económica son las plataformas de crowdfunding, y dentro de ellas Kickstarter es el buque insignia de ese fenómeno. Un referente a escala global.

Algunos datos sobre Kickstarter:
Fundada en EE UU en abril de 2009. En 2012 abre oficinas en Reino Unido y desde 2013 en Canadá, Australia y Nueva Zelanda.

Los proyectos tienen un máximo de 60 días para conseguir la financiación que solicitan. Si en ese plazo no llegan a la cuantía solicitada no reciben nada. Si lo rebasan no hay limitaciones, reciben todo lo que sea aportado por los mecenas que apoyen el proyecto.

Kickstarter cobra el 5% de las contribuciones si el proyecto llega al éxito. Si no llega, no cobra nada.

En el momento que escribo estas líneas (viernes ocho de noviembre de 2013) hay 4.199 proyectos activos en Kickstarter solicitando financiación.

Desde su creación hasta hoy se han subido a esta plataforma 121.400 proyectos. De ellos el 43% logró su objetivo de financiación.

kickstarterEste ingenio socio-tecnológico ha contribuido a poner en juego más de 51.000 proyectos en menos de cinco años, concretamente en cuatro años y siete meses: 30 proyectos al día.

Desde su fundación los proyectos subidos a Kickstarter han logrado imantar la cuantía de 863 millones de dólares, de los cuales:

  • 739 millones corresponden a los más de 51.000 proyectos que llegaron al éxito.
  • 98 millones a los 70.000 proyectos que no lo alcanzaron.
  • Y 26 millones a los 4.199 proyectos que ahora mismo están activos.

Esos 863 millones de dólares han sido creados mediante 11,9 millones de aportaciones efectuadas por 5,1 millones de personas, de las cuales el 29% ha hecho aportaciones a más de un proyecto.

De lo anterior se desprende que la aportación media es de 72 dólares y que la ratio global es de 100 mecenas por proyecto. Hablamos por tanto de un fenómeno de magnitud considerable, pero compuesto por proyectos de escala bastante manejable. De hecho:

  • El 75% de los proyectos exitosos recabaron menos de 10.000 dólares.
  • Un 23% recabaron entre 10.000 y 100.000 dólares.
  • Y tan sólo el 2% consiguieron más de 100.000 dólares procedentes de sus mecenas, habiendo 51 proyectos hasta la fecha que han superado el millón de dólares. El record: 10,2 millones del proyecto Pebble, un smartwatch.

Esta idoneidad del crowdfunding para ser aplicado en escalas manejables es una de las principales razones por las que su uso se va extendiendo por todo tipo de actividades y latitudes.

Lo que comenzó siendo una fórmula para financiar proyectos culturales de naturaleza indie (música, cortometrajes, teatro, fotografía, comic, …), se fue extendiendo hacia todo tipo de proyectos e iniciativas donde un Creador busca establecer un puente directo con su Público, proponiendo que éste se implique en su desarrollo y obtenga, en intercambio, un beneficio que puede tomar diferentes formas.

Hay dos formatos básicos a través de los cuales se ha venido concretando esa relación directa entre Creadores y Público:

1. La donación, entendida como el apoyo a un proyecto simplemente “porque sí” por el simple -y gran- hecho de que el mecenas quiere que salga adelante, sin más retorno (que ya es), o con retornos de carácter sentimental (camisetas, chapas, figurar en los créditos …).

2. Pre-compra: antes de que un bien se fabrique o un servicio se preste, la idea me gusta, la quiero, confío en el creador y la pre-compro. Es decir, “comprar fiado”. Arriesgo mi dinero en la confianza de que ese producto/servicio va a satisfacer mis necesidades. A cambio obtengo el beneficio de adquirirlo a menor precio que si hubiera sido creado por el conducto clásico, o tener un producto o servicio en exclusiva que de otro modo no sería posible disfrutar.

Ambos formatos han estado -y están- muy presentes en la expansión del crowdfunding en el mundo. A medida que el fenómeno ha ido creciendo en tamaño y relevancia, van tomando cuerpo otros dos modos de participar como “mecenas”, que están siendo usados por algunos inversores:

3. Préstamo. Decido invertir en un proyecto prestando dinero a cambio de un interés, financiación sin más.

4. Accionista: aporto capital y tomo una participación en la propiedad.

crowdcubeEl préstamo y la participación en la propiedad son formas de lo que se viene denominando el Equity Crowdfunding, del que se espera un fuerte crecimiento en los próximos años por la capacidad de atraer el interés de inversores, especialmente micro-inversores (el lugar de referencia en estos momentos es la plataforma Crowdcube).

Esto hace que el ecosistema crowdfunding se haga más complejo, más diverso y con la participación de diferentes roles: gestores de las plataformas, creadores de proyectos, donantes, pre-compradores, inversores, analistas del riesgo, asesores de inversión … y, también, organismos reguladores.

Hasta hoy el crowdfunding se ha desarrollado por el impulso espontáneo de la sociedad civil orquestada en comunidades. Una vez demostrado su éxito y viabilidad, está en juego el Gran Salto que, para producirse, necesitará de una legislación que aporte garantías, sin mermar la frescura del fenómeno. En este asunto veremos una muestra del delicado equilibrio entre seguridad (jurídica) y libertad (creativa).

En cualquier caso, sea cual sea el tacto del legislador, el crowdfunding ha llegado a nuestras sociedades para quedarse entre nosotros. ¿Por qué pienso así?:

1) Porque es transparente.

2) Porque hay intercambio simétrico entre las partes.

3) Porque permite que una comunidad de personas afines y con un propósito en común se responsabilice por hacer posible lo que quiere.

4) Porque promueve la excelencia: los creadores tienen que ofrecer la mejor versión de sí mismos para captar el interés de su público.

5) Porque es altamente eficiente: el 100% de los recursos liberados van a la creación.

6) Porque protege la libertad creativa: el creador toma el control del proceso de creación, sin injerencias de los financiadores en sus decisiones. Este es un aspecto clave del fenómeno y el Equity Crowdfunding y los reguladores tienen ahí uno de los principales desafíos.

7) Porque gracias a las plataformas es sumamente sencillo el acto de participar para quien quiere apoyar una iniciativa.

8) Porque es un proceso de co-gestación, ya que el creador no sólo toma el recurso económico sino también el aliento de su público.

9) Porque hay sensación de conquista.

10) Porque, gracias a todo ello, la comunidad se empodera, dotándose de mayor capacidad para plantearse la siguiente iniciativa: es un modo de relación que guarda memoria y se hace cada vez más fuerte.

Todo ello nos ayuda a entender la curva que vemos en la figura 1 donde aparece la gráfica de Google Trends cuando le pedimos las búsquedas del término “crowdfunding” en el mundo. Ahí se aprecia como la naturaleza lineal del crecimiento de los primeros años da paso a una dinámica exponencial a partir de 2012.

SearchFor_Crowdfunding_worlwide

SearchFor_Crowdfunding_worlwide

Algo similar vemos en la figura 2 que muestra los resultados de la misma búsqueda en España. En nuestro país son varias las plataformas de crowdfunding que han visto la luz en los últimos años, siendo tres de ellas las que han alcanzado ya un punto de madurez: lánzanos, verkami y goteo.

SearchFor_Crowdfunding_Spain

SearchFor_Crowdfunding_Spain

Me detendré un momento a comentar algunos datos que cualquier persona puede consultar en la web de Verkami:

Fundada en Mataró a finales de 2010 por un padre y sus dos hijos, aficionados a las artes y la cultura.

Verkami_foundersEl pasado mes de octubre fue galardonado por Naciones Unidas.

Hoy, ocho de noviembre, tiene 180 proyectos activos.

Desde su fundación ha alojado 2.200 proyectos, de los cuales el 70% (1.530) alcanzó la financiación que solicitaba.

En un momento de profunda dificultad económica en nuestro país Verkami ha atraído 7,43 millones de euros procedentes de 189.000 contribuciones. La contribución media es de 32 euros.

Salvando las distancias, el fenómeno presenta claras simetrías de naturaleza con Kickstarter. Volvemos a ver la escala manejable de proyectos que tienden un puente directo entre Creadores y (su) Público, atrayendo aportaciones de pequeña cuantía que, sumadas, hacen un cambio sostenido y relevante.

El crowdfunding está permitiendo liberar micro-recursos hacia el torrente sanguíneo de la economía que de otro modo no se pondrían en juego.

Permite liberar en forma de dinero la energía social residente en las comunidades: crowdpower.

Nos muestra que lo pequeño no sólo es hermoso, también poderoso.

Por ello, para compensar cada Telediario que veáis, os animo a dar una vuelta por la plataforma de crowdfunding que más os guste. Y, por su puesto, os animo a que contribuyáis a los proyectos que os interesen.

Es un gozo para el alma Apreciar Verdaderos Brotes Verdes.

Referencias:
www.rachelbotsman.com
www.kickstarter.com
www.verkami.com
www.lanzanos.com
www.goteo.org
www.crowdacy.com
www.manifiestocrowd.com

Manifiesto_BarVicenteLosPepesMi regalo de Reyes está en el Puerto de Santa María, Cádiz.

Es un Monumento a la Autenticidad, que habita un rincón discreto del Bar Vicente Los Pepes. Es un Canto tejido con púas de terciopelo, descarnado y acogedor a un tiempo.

Confieso que celebré íntimamente que este Manifiesto estuviera a la vista del público. Lo hace un ejercicio honesto y valiente. Bravo!

Me recordó un pensamiento de Joan Jiménez «si nos dedicáramos a ser nosotros mismos dejaríamos de estar preocupados por diferenciarnos

La foto no es muy buena, así que transcribo el texto que me conmovió al leerlo, en una mañana normal y cotidiana, mientras desayunaba, antes de ir al mercado.

Gracias Vicente (por cierto, las tostadas están buenísimas. Volveré).

«Estamos por el talento, la ética, la sensibilidad, el agua, el inconformismo, la política otra, la civilidad, las asociaciones de los ciudadanos, la paz, la conciencia, las artes, la educación, el mestizaje, el politeísmo, la cultura, las redes, la poligamia, la transgresión, lo raro, los olvidados, la creatividad, las víctimas, la cogestión, la libertad, la piel, la solidaridad, el sentido, el intercambio, la esperanza, la información …

Nos encantan los impacientes, los informales, los ardientes, las mujeres, los tópicos/reales, los altermundistas …

Vamos a construir una historia emocionante, vírica, vital, única, cómplice …

¡¡¡Queremos empujar un mundo mejor, otro, compartido!!!

Los Pepes A»

Dedicado a mi amigo José Illana.

La música acompaña.

La música acompaña.

Esta encuesta que hemos realizado en España nos pone delante tres datos claros: a) la música es relevante para millones de personas, b) Internet nos da acceso a su inmensidad y c) el smartphone ubicuidad.

Son tres vientos favorables que hacen de la música tu compañera.

Nuestra relación con la música es una fuente de disfrute cotidiano, cómodo y relativamente económico. Es una experiencia recurrente, apetecible y, precisamente por ello, con alta probabilidad de ser compartida con el círculo de relaciones.

De ello se desprende que una marca que invierte en la música como puente de relación con los consumidores, no sólo está invirtiendo en una actividad con capacidad para captar la atención de su público objetivo, sino también con capacidad para formar parte de la relación que mantienen las personas entre sí.

A través de la música una marca puede formar parte de la Vida Social del Consumidor. La cuestión es ¿qué tipo de presencia en la música es adecuada para cada marca?

Comparto contigo mi punto de vista.

La música te permite dejar huella (no sólo impacto).
Todo es mucho más fácil si el público al que te diriges con tu inversión siente que tu presencia en la música es activa. Si entiende que gracias a tu marca se hace posible ese proyecto musical en el que estás invirtiendo y que, si lo hubiera hecho otra marca, sería de otro modo. Sería diferente.

Para obtener un retorno de calidad la marca que invierte tiene que dejar su huella en el proyecto, su sello. En definitiva, su marca.

Dejar huella es la condición necesaria para poder obtener reconocimiento, en el doble sentido de la palabra. El profesor José Antonio Marina nos habla de ese doble sentido:

“Reconocimiento es una palabra curiosa. En un principio designaba el mero percatarse de que ya habíamos conocido algo. Es la unión de una percepción con un recuerdo. ¿Cómo ha pasado a significar ‘mostrarse agradecido por cierto beneficio recibido’? (…)

El re del reconocimiento es el mismo re del recuerdo, palabra que procede de cor, corazón. Reconocer es aunar en nuestro corazón la alegría recibida y la causa de esa alegría.”

José Antonio Marina, Diccionario de los Sentimientos.

Este es el doble sentido del reconocimiento:

1) “Percatarse”: Notoriedad.
2) “Mostrarse agradecido por lo recibido”: Afecto (vía la gratitud).

Tenlo presente: tus opciones de retorno en notoriedad y afecto se verán incrementadas si tu marca deja su huella en los consumidores. Tienen que sentir que, en alguna medida, ese proyecto existe gracias a ti.

Crea algo Valioso, por Relevante, Coherente y Creíble.
Si quieres que tu marca deje huella, tu proyecto tiene que ser Valioso para ti y para el público al que te diriges. En el triángulo marcas-música-consumidor entiendo lo valioso como una síntesis de tres ingredientes: lo relevante, lo coherente y lo creíble.

Lo que considero Relevante atrae mi interés. Lo interesante capta mi atención. Prestando atención se esponjan los mecanismos de percepción, haciéndome más permeable a la experiencia que me están proponiendo.

Problema: ¿cómo voy a hacer algo relevante si mi marca no sabe de música?

No importa, ¿tu marca sabe de personas?

Si respondes afirmativamente busca al socio adecuado para crear el proyecto con el que imprimir tu huella en las personas a través de la música. Ese socio puede ser un artista conocido o anónimo, un instrumento musical, los propios fans de la música, los bares donde pinchan música, los emprendedores de barrio, un festival, un conservatorio, un futbolista, una película, Unicef …

La lista es prácticamente infinita.

Tu socio en un proyecto musical puede ser de cualquier naturaleza y estar en cualquier lugar. Sólo hay una cosa que todos los potenciales socios van a tener en común: también son una marca, como tú. Por lo tanto cualquier iniciativa de inversión en el territorio de la música es, por naturaleza, un Co-Branded Content Project.

Y ello implica que los valores de la /marca-inversor/ y los valores de la /marca-socio/ tienen que maridar adecuadamente pues, lo quieras o no, van a formar un todo. Ese trabajo de maridaje de valores cristaliza en una relación donde las dos marcas se prestan mutuamente poder en un efecto sinérgico.

El retorno de tu inversión será mejor si el consumidor percibe en vuestro proyecto …

Algo Coherente, con lo que ya sabe, piensa o imagina de vosotros.

Y si le parece Creíble viniendo de ambos.

La coherencia facilita la credibilidad. Si el proyecto se desarrolla en un territorio relevante, ya tienes los tres ingredientes de lo valioso para trabajar a favor de tu marca.

Es el momento de dar otro paso.

Contar una historia.
Pero no cualquier historia.

Tu proyecto musical tiene que ser una historia que genere en el público una vivencia acorde a vuestros intereses. La buena noticia es que la música es un lenguaje de gran plasticidad para contar historias.

La música se crea; se toca; se escucha; se baila; se canta; se ve; se disfruta; se descubre; se comparte; se discute; se compra; se regala; se recuerda; se ríe; se llora etc …

Se vive en vivo; se ve en la tele; se escucha en la radio; cuando conduzco, cuando cocino, cuando estudio … ; en casa, fuera de casa; cuando hago deporte; hablo de música con mis amigos; escucho a entendidos; mis músicos favoritos son personas a las que admiro; la tengo en soporte físico; en toda clase de dispositivos, etc…

¿Hay algo que quieras contar donde no haya sitio para la música?

Nos acompaña desde la noche de los tiempos, y hoy la tecnología nos da acceso continuo. Por su riqueza de recursos narrativos es genuinamente transmedia. No sólo por la diversidad de su lenguaje y de las situaciones en que se disfruta, sino también por la fertilidad en la relación interactiva con el público: la música facilita la participación de la gente.

Por todo ello es un territorio versátil para albergar e inspirar cualquier historia que provoque en el público la vivencia que tu marca quiere.

Si esa vivencia es valiosa las personas sentirán la necesidad de compartirla con sus círculos de relaciones. Formaréis parte de lo compartido. Tu marca y la de tu socio estaréis navegando la Vida Social de las Personas, y vuestro mensaje viajará más lejos, más tiempo.

Y aún tu proyecto puede tener más recorrido.

#nosolocompartir: dinámicas de creación colaborativa.
Tu historia puede alcanzar un nivel de atractivo tal que haya una porción de tu público objetivo que se muestre dispuesto a participar re-creando contenidos, añadiendo nuevas capas de interés a la historia inicial.

No serán muchas las personas que den el paso de crear contenidos nuevos, pero serán muchas más las que quieran ser espectadores de la participación de otros, añadiendo así una nueva capa de interés a tu historia, la cual ve incrementada la probabilidad de ser compartida.

Puedes optar por dejarlo ser de forma absolutamente espontánea, o también puedes optar por alentar y ofrecer un marco a este impulso co-creador dando paso a una creación colaborativa organizada o semi-organizada que, de nuevo, vuelve a generar contenido y alimenta la historia en una espiral que puede no tener fin.

Se difuminan los límites de la creación musical.
Este modelo de relación que favorece la participación y, en su caso, la creación colaborativa, es una propuesta donde se difuminan los límites entre el creador y la audiencia. Entre los productores y los creadores. Entre las marcas inversoras y los beneficiarios de la inversión.

Aflora un espacio de naturaleza “magmática”, una especie de sopa creativa en la que flotan artistas, productores, audiencia y anunciantes. Cuando una historia anida en esa sopa, todos sus integrantes tienen algo que ganar:

• Los artistas, hacer llegar su obra y vivir de ello.
• Los productores, su beneficio.
• La audiencia, disfrutar, compartir y participar.
• Los anunciantes, el retorno de su inversión en notoriedad y afecto.

El interés común a todos ellos es dar vida a una (buena) historia que imante con interés la atención de las personas. Este modo de estar presente en la música tiende a superar el corsé del concepto clásico de “campaña”. Una campaña vive lo que decide su anunciante. Una historia está viva mientras la gente le presta atención.

Si cuentas una buena historia en tu proyecto musical, durará mientras esté vivo el interés del público por relacionarse con esa historia y hacerla crecer. Y esto no se mide en tiempo “de reloj” sino en unidades de atención que la historia es capaz de atraer.

¿Se difuminan también los límites del negocio?
Si todos los ingredientes de la sopa tienen en común que el negocio se sostiene dando vida a buenas historias …

¿Podemos concebir un modelo de relación entre marcas, productores, artistas y público que no sólo tenga capacidad de crear y expandir cultura popular colaborativa, sino también de monetizarla y repartir los beneficios entre todas las partes que lo hacen posible?

¿Podemos imaginar a una marca co-creando proyectos musicales de tal calidad que haya personas dispuestas a pagar por ellos, y cuyo beneficio se reparte con los co-creadores, o se reinvierte en otros proyectos colaborativos?

¿Estamos en condiciones de imaginar que las inversiones en patrocinio musical de una marca se transformen en un acelerador de partículas creativas, que genere fenómenos culturales monetizables, enfocados a una audiencia que ya no es sólo un simple receptor pasivo de contenidos, sino un público que también puede ser co-creador y co-productor?

Quizás sean preguntas que hoy nos produzcan vértigo, pero creo que la puerta ya está abierta y es sólo cuestión de tiempo porque una comunidad de personas enfocadas a apoyar lo que consideran valioso es una energía social de gran poder.

Kickstarter nos lo está mostrando. En sus cuatro primeros años de vida (abril 2009-abril 2013) ha promovido 39.000 proyectos financiados con éxito vía crowdfunding (25 proyectos al día). De ellos, 11.100 (28%) son proyectos musicales.

Vivimos en la Era del Crow-Media.
El público ya no es una masa. Ahora se configura como multitud compuesta de comunidades que pueden organizarse en red para obtener lo que consideran valioso.

En la música ese consumidor crowd hoy puede …

• Participar en la difusión.
• Participar en la creación de contenidos.
• Participar en la financiación de los costes de producción.

¿Por qué no participar también en la inversión y en los beneficios?

¿Te imaginas a una marca contándote (buenas) historias a través de la música, que además te genere dinero?

¿Compartirías esa historia con tus amigos?

¿Esa marca obtendría tu reconocimiento?

¿Te dejaría huella?

Post publicado originalmente en el blog de MUWOM el 17 de junio de 2013, invitado por @RobertoCarreras.

Joan Melé trabaja en Triodos Bank, un banco diferente por transparente y ético. En esta entrevista en La 2 Joan habla sobre nuestra relación con el dinero.

Te la recomiendo entera, pero si no tienes tiempo ahora para disfrutarla te sugiero que veas del minuto 7:34 al 9:08.

Si te animas me encantaría saber qué te parece lo que nos dice Joan. Puedes escribirlo ahí abajo, en los comentarios. Muchas gracias!

El 9 de noviembre de 2012 Gunter Pauli nos habló en TedxValladolid de mentores, creatividad, naturaleza y desafío. El desafío de ver lo posible, atravesando el velo de lo obvio.

El desafío de usar la inteligencia que la naturaleza nos brinda, docta y generosamente, como inspiración para dar soluciones a los retos que tenemos que afrontar.

Resoné especialmente con una frase de su conferencia: «el futuro sólo depende de una cosa, de una cosa: de inspirar a los niños.»